Comparación de industrias

Está viendo información sobre las siguientes industrias:

  • Productores de hierro y acero El sector de productores de hierro y acero consiste en productores de acero con fábricas de hierro y acero y empresas con fundiciones de hierro y acero. El segmento de productores de acero incluye empresas que fabrican productos de hierro y acero de sus propias fábricas, como chapas laminadas, hojalata, tubos, tuberías y productos de acero inoxidable, titanio y aceros de alta aleación. Las fundiciones de hierro y acero, que funden diversos productos, normalmente compran hierro y acero a otras empresas. El sector también incluye centros de servicio de metal y otros mayoristas de metal que distribuyen, importan o exportan productos férricos. La producción de acero se realiza a través de dos métodos principales: el horno de oxígeno básico (BOF), que utiliza el mineral de hierro como insumo, y el horno de arco eléctrico (EAF), que utiliza chatarra de acero. Muchas empresas de la industria operan a escala internacional. Nota: con algunas excepciones, la mayoría de las empresas no extraen su propio mineral para fabricar productos de acero y hierro. Hay Estándares SASB diferentes para la industria de metales y minería (EM-MM).
    Eliminar
  • Ropa, accesorios y calzado El sector de ropa, accesorios y calzado incluye empresas dedicadas al diseño, la fabricación, la venta al por mayor y al por menor de diversos productos, tales como ropa para hombres, mujeres y niños, bolsos, joyas, relojes y calzado. Los productos son fabricados en gran medida por vendedores de los mercados emergentes, lo que permite a las empresas del sector centrarse principalmente en el diseño, la venta al por mayor, la comercialización, la gestión de la cadena de suministro y las actividades de venta al por menor.
    Eliminar

Cuestiones relevantes para ambos Industrias (9 de 26)

¿Por qué algunas cuestiones se muestran atenuadas? Las normas SASB varían según la industria, en función de los diferentes riesgos y oportunidades de sostenibilidad de cada industria. Las cuestiones atenuadas no se identificaron durante el proceso de elaboración de normas como aquellas que pueden afectar al valor de la empresa con mayor probabilidad, por lo que no se incluyen en la norma. Con el tiempo, a medida que el Consejo de Normas SASB siga recibiendo las opiniones del mercado, es posible que se añadan o eliminen algunas cuestiones de la norma. Cada empresa determina por sí misma si una cuestión de sostenibilidad puede afectar a su capacidad de crear valor empresarial. La norma está diseñada para la empresa típica de una industria, pero las empresas individuales pueden optar por informar sobre diferentes cuestiones de sostenibilidad en función de su modelo de negocio único.

Temas de divulgación

¿Cuál es la relación entre la categoría de cuestiones generales y los temas de divulgación? La categoría de cuestiones generales es una versión independiente de la industria de los temas de divulgación que aparecen en cada norma del SASB. Los temas de divulgación representan los impactos específicos de la industria en las categorías de cuestiones generales. Los temas de divulgación específicos de la industria garantizan que cada norma del SASB se adapte a la industria, mientras que las categorías de cuestiones generales permiten la comparación entre industrias. Por ejemplo, Salud y nutrición es un tema de divulgación en la industria de las bebidas sin alcohol, que representa una medida específica de la industria de la cuestión general Bienestar del cliente. Sin embargo, la cuestión Bienestar del cliente se manifiesta como el tema de la divulgación Medicamentos falsificados en la industria Biotecnología y productos farmacéuticos.
  • Productores de hierro y acero Remove
    Access Standard
    • Emisiones de GEI Esta categoría se refiere a las emisiones directas (alcance 1) de gases de efecto invernadero (GEI) que una empresa genera a través de sus operaciones. Esto incluye las emisiones de GEI procedentes de fuentes estacionarias (por ejemplo, fábricas, centrales eléctricas) y móviles (por ejemplo, camiones, vehículos de reparto, aviones), bien sea como resultado de la combustión de combustible o de liberaciones directas sin combustión durante actividades como la extracción de recursos naturales, la generación de energía, el uso de la tierra o los procesos biogénicos. La categoría incluye además la gestión de los riesgos normativos, el cumplimiento de la normativa medioambiental y los riesgos y oportunidades para la reputación, ya que están relacionados con las emisiones directas de GEI. Los siete GEI contemplados en el Protocolo de Kioto están incluidos en esta categoría: dióxido de carbono (CO2), metano (CH4), óxido nitroso (N2O), hidrofluorocarbonos (HFC), perfluorocarbonos (PFC), hexafluoruro de azufre (SF6) y trifluoruro de nitrógeno (NF3).
      • Emisión de gases de efecto invernadero La producción de hierro y acero genera importantes emisiones directas de gases de efecto invernadero (GEI), principalmente de dióxido de carbono y metano, procedentes de los procesos de producción y de la combustión de combustible en las fábricas. Aunque las mejoras tecnológicas han reducido las emisiones de GEI por tonelada de acero, su producción sigue requiriendo grandes cantidades de carbón en comparación con otros sectores. Los esfuerzos regulatorios para reducir las emisiones de GEI en la lucha contra el cambio climático pueden aumentar los costes y riesgos derivados del cumplimiento de las políticas de mitigación. Se puede lograr una eficiencia operativa reduciendo las emisiones de GEI. Dicha eficiencia puede mitigar el posible impacto financiero del aumento de los costes de combustible ocasionado por las regulaciones que pretenden limitar las emisiones de GEI (o fijarles un precio).
    • Calidad del aire Esta categoría aborda la gestión de los efectos en la calidad del aire resultantes de fuentes fijas (por ejemplo, fábricas, centrales eléctricas) y móviles (por ejemplo, camiones, vehículos de reparto, aviones), así como de las emisiones industriales. Los contaminantes atmosféricos relevantes incluyen, entre otros, los óxidos de nitrógeno (NOx), los óxidos de azufre (SOx), los compuestos orgánicos volátiles (COV), los metales pesados, las partículas y los clorofluorocarbonos. La categoría no incluye las emisiones de GEI, que se abordan en una categoría independiente.
      • Emisiones atmosféricas La producción de hierro y acero suele generar contaminantes del aire definidos, compuestos orgánicos volátiles (COV) y contaminantes del aire peligrosos que pueden tener importantes repercusiones a nivel local en la salud pública. Son especialmente preocupantes los óxidos de azufre, el dióxido de nitrógeno, el plomo, el monóxido de carbono y el manganeso, así como partículas tales como el hollín y el polvo, que se liberan durante el proceso de producción. En América del Norte, Europa occidental y Japón, la innovación tecnológica y las continuas mejoras en los procesos de fabricación de acero han reducido considerablemente los contaminantes del aire de la industria de producción de hierro y acero. Pero siguen siendo motivo de preocupación debido a la creciente inquietud pública y regulatoria sobre la contaminación del aire, así como a la expansión de la producción de acero en mercados emergentes. En estos mercados, la producción de hierro y acero puede verse afectada por los esfuerzos regulatorios encaminados a frenar la contaminación del aire. La gestión activa de las emisiones de las instalaciones mediante la aplicación de buenas prácticas en la industria a nivel mundial puede facilitar la transición a una producción sostenible de acero, reduciendo los costes y aumentando potencialmente la eficiencia operativa.
    • Gestión de la energía La categoría aborda los impactos ambientales asociados al consumo de energía. Aborda la gestión de la energía por parte de la empresa en la fabricación y/o para el suministro de productos y servicios derivados de proveedores de servicios públicos (red eléctrica) que no son propiedad de la empresa ni están controlados por ella. Más concretamente, incluye la gestión de la eficiencia e intensidad energética, la combinación de energías y la dependencia de la red. El uso de la energía en las fases anteriores (por ejemplo, los proveedores) y posteriores (por ejemplo, el uso de los productos) no está incluido en el ámbito de aplicación.
      • Gestión de la energía La producción de acero requiere cantidades importantes de energía, que se obtiene principalmente de la combustión directa de combustibles fósiles y de electricidad de la red. Producir con un uso intensivo de energía tiene repercusiones en el cambio climático, y la adquisición de electricidad de la red puede provocar emisiones indirectas de alcance 2. La elección entre diferentes procesos de producción (horno de arco eléctrico u horno de oxígeno básico integrado) puede influir en el hecho de que una empresa use combustibles fósiles o electricidad. Esta decisión, así como la elección entre carbón y gas natural o electricidad in situ y electricidad procedente de la red, puede influir mucho en los costes y la fiabilidad del suministro de energía. La energía asequible, de fácil acceso y fiable, es un importante factor competitivo en esta industria, y los costes de la energía representan una parte sustancial de los costes de fabricación. La forma de gestionar la eficiencia energética global, la dependencia de diferentes tipos de energía y los riesgos de sostenibilidad asociados, y la capacidad de acceso a fuentes de energía alternativas, pueden influir en la rentabilidad de las empresas siderúrgicas.
    • Gestión del agua y las aguas residuales Esta categoría aborda el uso del agua por parte de la empresa, el consumo de agua, la generación de aguas residuales y otros efectos de las operaciones en los recursos hídricos, que pueden verse influidos por las diferencias regionales en la disponibilidad y calidad de los recursos hídricos y la competencia por ellos. Más concretamente, aborda estrategias de gestión que incluyen, entre otras, la eficiencia, la intensidad y el reciclaje del agua. Por último, la categoría también aborda la gestión del tratamiento y el vertido de las aguas residuales, incluida la contaminación de las aguas subterráneas y los acuíferos.
      • Gestión del agua La producción de acero requiere importantes cantidades de agua. Las empresas se enfrentan a riesgos operativos, regulatorios y de reputación debido a la escasez de agua, su coste de adquisición, las regulaciones sobre los efluentes o la cantidad de agua utilizada y la competencia con las comunidades locales y otros sectores por los limitados recursos hídricos. Esto ocurre sobre todo en regiones donde escasea el agua, dadas las posibles limitaciones a su disponibilidad y la volatilidad de los precios. Las empresas que no pueden garantizar un suministro estable de agua podrían sufrir interrupciones en la producción, mientras que el aumento de los precios del agua podría incrementar directamente sus costes de producción. Por tanto, la adopción de tecnologías y procesos que reduzcan el consumo de agua podría a su vez reducir los riesgos y costes de explotación minimizando el impacto regulatorio, la escasez de agua y los problemas relacionadas con la comunidad.
    • Gestión de residuos y materiales peligrosos Esta categoría se ocupa de las cuestiones medioambientales relacionadas con los residuos peligrosos y no peligrosos generados por las empresas. Aborda la gestión de los residuos sólidos de una empresa en la fabricación, la agricultura y otros procesos industriales. Abarca el tratamiento, la manipulación, el almacenamiento, la eliminación y el cumplimiento de la normativa. Esta categoría no incluye las emisiones a la atmósfera ni a las aguas residuales, ni tampoco los residuos del final de la vida útil de los productos, que se tratan en categorías distintas.
      • Gestión de residuos Aunque la industria de producción de acero tiene altos índices de recuperación de residuos, genera cantidades importantes de residuos peligrosos. El sector genera 3 tipos principales de residuos: escorias, polvos y lodos. Estos subproductos a menudo se reciclan internamente o se venden a otras industrias. Sin embargo, los residuos como el polvo del proceso de los hornos de arco eléctrico, clasificado como material peligroso en los Estados Unidos debido a su contenido en metales pesados, pueden tener importantes repercusiones en el medioambiente y en la salud humana, implicar un riesgo de infracción regulatoria y aumentar los costes de explotación. Los riesgos derivados de los efectos a largo plazo de la eliminación de residuos pueden ocasionar altos costes, como los asociados a la contaminación de vertederos externos, ya que se puede obligar a los productores de hierro y acero a sanear y restaurar esos lugares. Por tanto, las empresas que reduzcan el flujo de residuos (sobre todo los peligrosos) y reciclen o vendan subproductos no peligrosos, podrían reducir los riesgos y costes regulatorios y aumentar sus ingresos.
    • Calidad y seguridad de los productos Esta categoría aborda cuestiones relacionadas con las características no deseadas de los productos vendidos o los servicios prestados que pueden crear riesgos para la salud o la seguridad de los usuarios finales. Se refiere a la capacidad de una empresa para ofrecer productos y/o servicios manufacturados que cumplan las expectativas de los clientes con respecto a sus características de salud y seguridad. Incluye, entre otras, cuestiones relacionadas con la responsabilidad, la gestión de las retiradas del mercado, las pruebas de los productos y la gestión de las sustancias químicas/contenidos/ingredientes de los productos.
      None
    • Salud y seguridad de los empleados Esta categoría se refiere a la capacidad de una empresa para crear y mantener un entorno de trabajo seguro y saludable, libre de lesiones, muertes y enfermedades (tanto crónicas como graves). Tradicionalmente se consigue mediante la aplicación de planes de gestión de la seguridad, el desarrollo de requisitos de formación para empleados y contratistas, y la realización de auditorías periódicas de sus propias prácticas y de las de sus subcontratistas. La categoría también recoge cómo las empresas garantizan la salud física y mental de los trabajadores a través de la tecnología, la formación, la cultura corporativa, el cumplimiento de la normativa, la supervisión y las pruebas, y los equipos de protección personal.
      • Salud y seguridad de la fuerza laboral Los procesos industriales empleados en la producción de hierro y acero pueden suponer serios riesgos para los empleados y contratistas que trabajan en las fábricas. Dadas las altas temperaturas y la maquinaria pesada que se usa, las lesiones y muertes de los trabajadores son motivo de preocupación para los productores de hierro y acero. El sector presenta tasas de mortalidad relativamente altas, lo que significa que el entorno laboral es peligroso y requiere una cultura de alta seguridad y políticas sobre salud y seguridad. Aunque las tasas de accidentes en la industria están disminuyendo a largo plazo, las lesiones y muertes de los trabajadores pueden dar lugar a sanciones reglamentarias, publicidad negativa, descenso en la moral y en la productividad de los trabajadores y aumento de los costes médicos e indemnizaciones.
    • Gestión de la cadena de suministro Esta categoría aborda la gestión de los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza dentro de la cadena de suministro de una empresa. Aborda las cuestiones relacionadas con las externalidades medioambientales y sociales creadas por los proveedores a través de sus actividades operativas. Estas cuestiones incluyen, entre otras, la responsabilidad medioambiental, los derechos humanos, las prácticas laborales y la ética y la corrupción. La gestión puede implicar el cribado, la selección, el seguimiento y el compromiso con los proveedores sobre sus impactos ambientales y sociales. Esta categoría no aborda las repercusiones de los factores externos, tales como el cambio climático y otros factores medioambientales y sociales, en las operaciones de los proveedores y/o en la disponibilidad y el precio de los recursos clave, que se tratan en una categoría aparte.
      • Gestión de la cadena de suministro El mineral de hierro y el carbón son materias primas esenciales en el proceso de producción de acero. La extracción de mineral de hierro y la producción de carbón son procesos intensivos en recursos. La extracción de estos materiales suele provocar importantes externalidades ambientales y sociales que afectan a las comunidades locales, los trabajadores y los ecosistemas. Esas repercusiones pueden ocasionar interrupciones en las operaciones mineras debido a protestas de la comunidad, a medidas legales o regulatorias o al aumento de los costes de extracción a consecuencia de los costes derivados de sanciones o del cumplimiento de las normas. A consecuencia de ello, las empresas siderúrgicas pueden sufrir interrupciones o, en algunos casos, sanciones reglamentarias relacionadas con el impacto ambiental o social provocado por la empresa minera suministradora. A fin de reducir al mínimo esos riesgos, los productores de hierro y acero pueden gestionar de forma proactiva la selección y supervisión de sus proveedores directos de materias primas esenciales para asegurarse de no incurrir en prácticas ilegales o perjudiciales para el medioambiente o la sociedad.
    • Abastecimiento y eficiencia de los materiales Esta categoría aborda cuestiones relacionadas con la resistencia de las cadenas de suministro de materiales a los impactos del cambio climático y otros factores ambientales y sociales externos. Plasma las repercusiones de estos factores externos en la actividad operativa de los proveedores, que pueden afectar además a la disponibilidad y el precio de los recursos clave. Aborda la capacidad de una empresa para gestionar estos riesgos a través del diseño, la fabricación y la gestión del final de la vida útil del producto, por ejemplo, mediante el uso de materiales reciclados y renovables, la reducción del uso de materiales clave (desmaterialización), la maximización de la eficiencia de los recursos en la fabricación y la realización de inversiones en I+D en materiales sustitutivos. Además, las empresas pueden gestionar estas cuestiones mediante la selección, el seguimiento y el compromiso con los proveedores para garantizar su resistencia a los riesgos externos. No aborda las cuestiones relacionadas con las externalidades medioambientales y sociales creadas por la actividad operativa de los proveedores individuales, que se tratan en una categoría aparte.
      None
  • Ropa, accesorios y calzado Remove
    Access Standard
    • Emisiones de GEI Esta categoría se refiere a las emisiones directas (alcance 1) de gases de efecto invernadero (GEI) que una empresa genera a través de sus operaciones. Esto incluye las emisiones de GEI procedentes de fuentes estacionarias (por ejemplo, fábricas, centrales eléctricas) y móviles (por ejemplo, camiones, vehículos de reparto, aviones), bien sea como resultado de la combustión de combustible o de liberaciones directas sin combustión durante actividades como la extracción de recursos naturales, la generación de energía, el uso de la tierra o los procesos biogénicos. La categoría incluye además la gestión de los riesgos normativos, el cumplimiento de la normativa medioambiental y los riesgos y oportunidades para la reputación, ya que están relacionados con las emisiones directas de GEI. Los siete GEI contemplados en el Protocolo de Kioto están incluidos en esta categoría: dióxido de carbono (CO2), metano (CH4), óxido nitroso (N2O), hidrofluorocarbonos (HFC), perfluorocarbonos (PFC), hexafluoruro de azufre (SF6) y trifluoruro de nitrógeno (NF3).
      None
    • Calidad del aire Esta categoría aborda la gestión de los efectos en la calidad del aire resultantes de fuentes fijas (por ejemplo, fábricas, centrales eléctricas) y móviles (por ejemplo, camiones, vehículos de reparto, aviones), así como de las emisiones industriales. Los contaminantes atmosféricos relevantes incluyen, entre otros, los óxidos de nitrógeno (NOx), los óxidos de azufre (SOx), los compuestos orgánicos volátiles (COV), los metales pesados, las partículas y los clorofluorocarbonos. La categoría no incluye las emisiones de GEI, que se abordan en una categoría independiente.
      None
    • Gestión de la energía La categoría aborda los impactos ambientales asociados al consumo de energía. Aborda la gestión de la energía por parte de la empresa en la fabricación y/o para el suministro de productos y servicios derivados de proveedores de servicios públicos (red eléctrica) que no son propiedad de la empresa ni están controlados por ella. Más concretamente, incluye la gestión de la eficiencia e intensidad energética, la combinación de energías y la dependencia de la red. El uso de la energía en las fases anteriores (por ejemplo, los proveedores) y posteriores (por ejemplo, el uso de los productos) no está incluido en el ámbito de aplicación.
      None
    • Gestión del agua y las aguas residuales Esta categoría aborda el uso del agua por parte de la empresa, el consumo de agua, la generación de aguas residuales y otros efectos de las operaciones en los recursos hídricos, que pueden verse influidos por las diferencias regionales en la disponibilidad y calidad de los recursos hídricos y la competencia por ellos. Más concretamente, aborda estrategias de gestión que incluyen, entre otras, la eficiencia, la intensidad y el reciclaje del agua. Por último, la categoría también aborda la gestión del tratamiento y el vertido de las aguas residuales, incluida la contaminación de las aguas subterráneas y los acuíferos.
      None
    • Gestión de residuos y materiales peligrosos Esta categoría se ocupa de las cuestiones medioambientales relacionadas con los residuos peligrosos y no peligrosos generados por las empresas. Aborda la gestión de los residuos sólidos de una empresa en la fabricación, la agricultura y otros procesos industriales. Abarca el tratamiento, la manipulación, el almacenamiento, la eliminación y el cumplimiento de la normativa. Esta categoría no incluye las emisiones a la atmósfera ni a las aguas residuales, ni tampoco los residuos del final de la vida útil de los productos, que se tratan en categorías distintas.
      None
    • Calidad y seguridad de los productos Esta categoría aborda cuestiones relacionadas con las características no deseadas de los productos vendidos o los servicios prestados que pueden crear riesgos para la salud o la seguridad de los usuarios finales. Se refiere a la capacidad de una empresa para ofrecer productos y/o servicios manufacturados que cumplan las expectativas de los clientes con respecto a sus características de salud y seguridad. Incluye, entre otras, cuestiones relacionadas con la responsabilidad, la gestión de las retiradas del mercado, las pruebas de los productos y la gestión de las sustancias químicas/contenidos/ingredientes de los productos.
      • Gestión de sustancias químicas en los productos La introducción de la Ley de mejora de la seguridad de los productos de consumo en los Estados Unidos y la legislación sobre registro, evaluación, autorización y restricción de sustancias químicas en la Unión Europea demuestra la creciente preocupación normativa y de los grupos de interésen torno al uso de sustancias nocivas o potencialmente nocivas en los productos de consumo, tales como la ropa, los accesorios y el calzado. Se ha descubierto que los productos terminados de ropa y calzado contienen trazas de sustancias químicas prohibidas o reguladas. Dependiendo de la sustancia química, la cantidad presente en un producto y el tipo de exposición a la que se enfrentan los consumidores, determinadas sustancias pueden ser cancerígenas y pueden perturbar la actividad hormonal en los seres humanos y otros organismos. La falta de gestión de esta cuestión puede generar una supervisión reguladora adicional e impactar en la licencia social de una empresa para operar. Además, la presencia de sustancias químicas nocivas en los productos puede dar lugar a retiradas del mercado, litigios y daños a la reputación. Las empresas de este sector pueden trabajar tanto en la fase de diseño como en la de fabricación para gestionar el uso de las sustancias químicas que son motivo de preocupación, desarrollar alternativas seguras y eliminar las que se han prohibido. Dada la dependencia de este sector en de la fabricación externa, esto implica asociaciones proactivas con los proveedores. Al abordar este asunto, las empresas deben equilibrar el peligro que representan ciertas sustancias químicas para los consumidores con la calidad de un producto y sus costes de producción.
    • Salud y seguridad de los empleados Esta categoría se refiere a la capacidad de una empresa para crear y mantener un entorno de trabajo seguro y saludable, libre de lesiones, muertes y enfermedades (tanto crónicas como graves). Tradicionalmente se consigue mediante la aplicación de planes de gestión de la seguridad, el desarrollo de requisitos de formación para empleados y contratistas, y la realización de auditorías periódicas de sus propias prácticas y de las de sus subcontratistas. La categoría también recoge cómo las empresas garantizan la salud física y mental de los trabajadores a través de la tecnología, la formación, la cultura corporativa, el cumplimiento de la normativa, la supervisión y las pruebas, y los equipos de protección personal.
      None
    • Gestión de la cadena de suministro Esta categoría aborda la gestión de los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza dentro de la cadena de suministro de una empresa. Aborda las cuestiones relacionadas con las externalidades medioambientales y sociales creadas por los proveedores a través de sus actividades operativas. Estas cuestiones incluyen, entre otras, la responsabilidad medioambiental, los derechos humanos, las prácticas laborales y la ética y la corrupción. La gestión puede implicar el cribado, la selección, el seguimiento y el compromiso con los proveedores sobre sus impactos ambientales y sociales. Esta categoría no aborda las repercusiones de los factores externos, tales como el cambio climático y otros factores medioambientales y sociales, en las operaciones de los proveedores y/o en la disponibilidad y el precio de los recursos clave, que se tratan en una categoría aparte.
      • Efectos ambientales en la cadena de suministro La cadena de suministro global del sector de la ropa, los accesorios y el calzado contribuye de manera significativa a las externalidades ambientales a través del consumo de agua y la contaminación, así como la contaminación del aire. La contaminación del agua resulta del vertido de productos químicos durante los procesos de teñido y curtido con uso intensivo de agua, mientras que la contaminación del aire proviene del uso de energía de la industria. Estos efectos tienen el potencial de dañar la reputación de una empresa y de afectar a las estructuras de costes a lo largo del tiempo. La escala de esta cuestión se ha intensificado históricamente por el hecho de que el sector depende de socios fabricantes en mercados emergentes en los cuales la reglamentación y la supervisión ambientales son limitadas. Sin embargo, el mayor escrutinio por parte de los interesados y los consumidores, junto con el desarrollo de una reglamentación más estricta en ciertas regiones, ha llevado a las empresas de todo el sector a trabajar con los proveedores para reducir su impacto ambiental. Las empresas de ropa, accesorios y calzado que aprovechen su poder de mercado para trabajar con los proveedores a fin de mejorar la eficiencia operativa y el consumo de recursos y limitar la contaminación podrán mitigar los costes relacionados con el aumento de la escasez de recursos y la reglamentación. Además, las que colaboran con los proveedores mediante la supervisión, la auditoría y el establecimiento de normas estrictas probablemente estarán mejor posicionadas para proteger el valor para los accionistas a largo plazo.
      • Condiciones laborales en la cadena de suministro El tratamiento de los trabajadores y la protección de los derechos del trabajador en la cadena de suministro del sector de la ropa, los accesorios y el calzado es una preocupación creciente entre los consumidores, los reguladores y las principales empresas. Los aspectos críticos de este tema incluyen la salud y la seguridad de los empleados, el pago justo, el trabajo infantil y el trabajo forzado. Si bien las empresas continúan mejorando su rendimiento al respecto, la dependencia del sector en un sistema de múltiples niveles de proveedores, subcontratistas, empresas de contratación de mano de obra y trabajadores a tiempo parcial hace que este sea un tema difícil de manejar. Dado que las empresas del sector suelen contratar a proveedores de los países con los costes directos más bajos, los productos del sector suelen fabricarse en países que tienen una reglamentación o una aplicación de la ley limitada para proteger a los trabajadores. Esta dinámica puede aumentar la exposición de una empresa a riesgos para su reputación y repercutir en los costes y las ventas a corto y largo plazo. Esos efectos pueden derivarse del aumento de la reglamentación y su aplicación en respuesta a incidentes de seguridad o laborales de alto perfil, interrupciones de la producción debido a huelgas y otros paros laborales, o a través de un cambio en la demanda de las empresas asociadas con esos incidentes. Por consiguiente, las empresas que cuentan con estándares sólidos de la cadena de suministro, supervisión y compromiso con los proveedores para abordar las preocupaciones laborales pueden estar en mejores condiciones de proteger el valor para sus accionistas a largo plazo.
    • Abastecimiento y eficiencia de los materiales Esta categoría aborda cuestiones relacionadas con la resistencia de las cadenas de suministro de materiales a los impactos del cambio climático y otros factores ambientales y sociales externos. Plasma las repercusiones de estos factores externos en la actividad operativa de los proveedores, que pueden afectar además a la disponibilidad y el precio de los recursos clave. Aborda la capacidad de una empresa para gestionar estos riesgos a través del diseño, la fabricación y la gestión del final de la vida útil del producto, por ejemplo, mediante el uso de materiales reciclados y renovables, la reducción del uso de materiales clave (desmaterialización), la maximización de la eficiencia de los recursos en la fabricación y la realización de inversiones en I+D en materiales sustitutivos. Además, las empresas pueden gestionar estas cuestiones mediante la selección, el seguimiento y el compromiso con los proveedores para garantizar su resistencia a los riesgos externos. No aborda las cuestiones relacionadas con las externalidades medioambientales y sociales creadas por la actividad operativa de los proveedores individuales, que se tratan en una categoría aparte.
      • Suministro de materias primas La industria de la ropa, los accesorios y el calzado depende de numerosas materias primas como insumos clave para los productos terminados, incluidos el algodón, el cuero, la lana, el caucho y los minerales y metales preciosos. Los efectos de la sostenibilidad relacionados con el cambio climático, la utilización de la tierra, la escasez de recursos y los conflictos en las regiones en las que opera la cadena de suministro de la industria están conformando cada vez más la capacidad de la industria para obtener materiales. La capacidad de las empresas para gestionar la posible escasez de materiales, las interrupciones del suministro, la volatilidad de los precios y los riesgos para la reputación se ve dificultada por el hecho de que se abastecen de materiales de regiones geográficamente diversas a través de cadenas de suministro que a menudo carecen de transparencia. Si no se gestiona eficazmente esta cuestión se pueden reducir los márgenes, limitar el crecimiento de los ingresos o aumentar los costes o el capital. Los tipos de riesgo asociados con el abastecimiento de diferentes materiales pueden requerir diferentes soluciones, entre ellas la colaboración con los proveedores, el aumento de la transparencia, el uso de estándares de certificación o el uso de materiales alternativos innovadores. Es probable que las empresas más proactivas reduzcan su exposición a la volatilidad de los precios y a posibles interrupciones del suministro, al tiempo que mejoran la reputación de su marca y desarrollan nuevas oportunidades de mercado.

Seleccionar hasta 4 industrias

actual Industrias:
Productores de hierro y acero
|
Ropa, accesorios y calzado
Sector de bienes de consumo
Sector de procesamiento de extractos y minerales
Sector financiero
Sector de alimentos y bebidas
Sector de asistencia sanitaria
Sector de infraestructuras
Sector de recursos renovables y energías alternativas
Sector de transformación de recursos
Sector de servicios
Sector de tecnología y comunicaciones
Sector del transporte